Hola a todos,
¡Hoy os traigo una nueva idea para verano!
Ahora empiezan a apetecer ensaladas y cremas frías, ¿verdad? Entonces…¿por qué no servir una crema fría o gazpacho en un cuenco muy especial?
Da un poco de trabajo para lo “poco” que dura, pero merece la pena ver la cara de vuestros invitados cuando presentéis la comida o la cena así.
Se pueden hacer cuencos individuales o uno grande, como más os guste. Lo que sí recomiendo a la hora de servir, es poner un platito debajo.
CUENCO PARA CREMAS FRÍAS O GAZPACHO
INGREDIENTES
• Agua
• Hierbas o flores al gusto: aromáticas, simplemente decorativas…
También necesitaremos:
• Dos cuencos, uno grande y otro más pequeño que encaje bien dentro dejando 1 cm libre entre ellos aproximadamente
• Algo de peso que podamos llevar al congelador (un vaso por ejemplo).
ELABORACIÓN
Poner en el cuenco grande un dedo aproximadamente de agua. Añadir las hierbas, según queramos disponerlas. Si los hierbas aromáticas, aportarán aroma a la crema, así que queda a nuestra elección elegir unas u otras.
Congelar dos horas aproximadamente.
Retirar del congelador, poner encima en cuenco pequeño, bien centrado, y poner el peso. Añadir el agua por los laterales hasta que esté casi lleno. Volver a congelar (unas 18-20 horas).
Sacar del congelador, quitar el cuenco de arriba y ayudándonos con agua templada o caliente, mojando los laterales, desmoldar.
Una vez desmoldado lo guardamos en el congelador hasta el momento de consumir.
Servir el gazpacho o la crema y tomar inmediatamente.
¿Qué os parece? ¿Os váis a animar a hacerlas?
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