¿¿¿UN MEEEES??? Me preguntan mis amigos americanos como si no hubieran entendido bien que les he dicho que sí, que en España, lo normal es tener un mes de vacaciones en verano. Su reacción destila una mezcla de asombro, envidia sana y perplejidad…


 

Porque la media aquí ronda los 10 días seguidos de descanso al año. Y otra cosa: entre los 33 países más ricos del mundo, Estados Unidos es el único donde el empresario no está obligado a pagar las vacaciones. Si la empresa te lo concede o lo negocias, afortunado tú. Una cuarta parte de los trabajadores no tienen esa suerte.

 “Sonaría fatal si digo a mis jefes que cojo más de dos semanas, pensarían que soy una irresponsable”, me soltó un día una de mis vecinas. La miré con cara de póquer y hasta sentí una punzada de culpabilidad pensando que nosotros estábamos a punto de irnos el mes enterito.


Claro que en un país con más de 300 millones de habitantes, hay de todo. También me he encontrado con profesionales a los que sí les pagan hasta cuatro semanas de vacaciones, pero nunca las disfrutan del tirón.

Los hay y muchos que aunque hagan las maletas, viven atados al portátil o al móvil  por imperativo expreso de la empresa. Están “on call”.  En CNN, un ingeniero contaba que la broma habitual es decir que vacaciones sólo significa trabajar desde otro sitio, sea la playa, la montaña o el hotel.


Otro dato. Sólo el 57% de los americanos cogen todas las vacaciones que les corresponden, frente, por ejemplo, al casi 90% de los franceses que lo hacen. ¿Razones? Temor a parecer que no estás comprometido con tu trabajo, que otro más hormiguita te quite el puesto y ATENCION: sentirse más feliz produciendo que descansando o disfrutando de los tuyos. Los americanos ganan más dinero pero menos tiempo. Su trabajo cuenta mucho en la balanza de la felicidad. Una cultura distinta a la europea.

 

¿Es más productivo un país que vive para trabajar o que trabaja para vivir? USA es el cuarto en la lista de competitivad mundial, por debajo de Suecia donde la ley obliga a cinco semanas de vacaciones pagadas. ¿Conclusiones?