Como diría aquél: «Para el siguiente truco necesitaré un palo de selfie, unas manos, una camisa con las mangas extralargas y muy poco sentido del ridículo». Es todo lo que ha empleado un joven japonés para fabricar este curioso brazo-selfie.
Explica este joven emprendedor que sentía vergüenza cuando se fotografiaba utilizando el tradicional palo de selfie y se propuso camuflarlo. Para ello, se hizo con unas manos de silicona, un soporte para sujetar el móvil y finalmente una camisa con mangas gigantes.
El resultado no es muy discreto que digamos, pero hay que reconocer que las fotos que se obtienen con él mejoran bastante la perspectiva.
Un ejemplo más de la locura por los selfies de la que os hablé en otro post. Sin duda, habrá más.
Sin comentarios