A estas alturas de la vida, Karen Klein debe creer que está soñando. Su nombre se ha hecho famoso en pocos días y no sólo en Estados Unidos.  Y todo por una historia con dos caras. Por un lado,  la crueldad de un grupo de adolescentes que la acosó e insultó sin piedad en el autobús del cole. Por otro, la solidaridad que su caso ha despertado gracias a la idea de alguien y a la generosidad de muchos. Karen se merece unas vacaciones y las va a tener a lo grande.

 

El lunes, como todos los días, esta monitora de autobús de 68 años y abuela de ocho nietos, hacía el mismo trayecto de siempre con los estudiantes de séptimo de secundaria de Greece, al norte del estado de Nueva York. Pero esta vez, el viaje fue insoportable. Cuatro de los alumnos no tuvieron mejor idea que meterse con ella, acosarla con insultos, burlándose de su aspecto, de su familia y de sus sentimientos. Karen aguantó hasta que se le saltaron las lágrimas.

Hasta que uno le espetó que: «no tienes familia porque todos prefieren matarse antes que estar contigo». Hace 10 años el hijo mayor de Karen se suicidió.

No hubiera pasado de ser un caso más de «bullying», -esta vez contra una persona mayor y no entre compañeros de cole- si uno de los chicos no hubiera grabado la escena con su móvil para colgarla en youtube. No hubiera pasado de ahí, si uno de los que vió el vídeo no fuera Max Sidorov, un nutricionista canadiense de 25 años que se indignó tanto que se le ocurrió algo.

http://www.indiegogo.com/loveforkarenhklein

Desde su blog, Max propuso hacer donaciones para pagarle a Karen las mejores vacaciones de su vida y resarcirle de tanto maltrato. El objetivo era llegar a 5.000 dólares. A la hora que escribo esto y después de tres días de campaña, la cifra supera el medio millón.

Además de dinero, se han recaudado riadas de comentarios apoyando a Karen y condenando la actitud de los chicos. Y como en todo, en esto también hay quien no tiene medida y han llegado incluso amenazas de muerte contra ellos. Tanto es así que la policía ha tenido que reforzar la vigilancia cerca de sus casas.

Karen no va a presentar cargos contra sus acosadores. Bastante han tenido con las críticas y la condena social.  «Al fin y al cabo, son chicos de 13 años y esto tiene que parar ya»  ha dicho el capitan de policía de la zona. Desde luego, parece haberles servido de escarmiento.

Aún así, los chicos han tardado unos días en pedir perdón a su víctima y  lo han hecho sin dar la cara, sólo por escrito. Con cartas en las que expresan su arrepentimiento y reconocen el mal que han  hecho. Sus padres les han ayudado.

El blog de Max, www.Indiegogo.com sigue recibiendo donaciones. Un blog, por cierto, que se dedica a eso, a anunciar y presentar causas, proyectos e ideas de lo más diverso-con trasfondo altruista- buscando el apoyo económico de la gente o ayudando para hacer tu propia campaña.  Os invito a echarle un vistazo porque es muy interesante.

Estos días Karen vive abrumada y agradecida por tanta respuesta generosa. Hay quien dice que su fama ha llegado a Hollywood y un agente le ha propusto hablar de un libro o incluso de una película…

Espero que su caso sirva para que muchos se lo piensen dos veces antes de hacer «bullying»,  para ridiculizar a quienes lo practican y animar a sus víctimas a denunciar y defenderse. Espero que ayude a preguntarnos por qué unos chicos de 13 años necesitan ser tan crueles con los demás para pasarlo bien.