La crisis amenaza los escasos avances que se han hecho en España durante la última década para conciliar la vida profesional y la familia. No sé si vosotros tenéis la misma sensación que yo pero todavía muchos jefes hablan con la boca pequeña del derecho a compaginar la vida laboral y la familiar. Os propongo un experimento con vuestros hijos.
Vamos a aceptar el reto que lanza La Comisión Nacional para la Racionalización de los Horarios Españoles. Ha convocado su IV Concurso Escolar (pinchad para las bases) bajo el título «¿Cuánto tiempo tienes para mí?». Invita a todos los alumnos de Primaria y Secundaria a que intenten plasmar lo que para ellos significa el concepto de conciliación de vida personal, laboral y familiar. Para ello se han creadodos modalidades distintas: por un lado se anima a los alumnos de entre 6 y 12 años a que realicen un dibujo tamaño A4 y, por otro, a los de 12 a 16 años a que se pongan en la piel de un periodista y realicen una entrevista a sus progenitores. Hay de plazo hasta el 24 de mayo.
La Comisión Nacional para la Racionalización de los Horarios Españoles es una entidad sin ánimo de lucro cuyos fines son concienciar a la sociedad sobre el valor del tiempo y la importancia de su gestión. Acabar con los horarios partidos, las comilonas, las reuniones a última hora de la tarde. Hay que cambiar el modelo. La Comisión Nacional está integrada por los representantes de 134 instituciones y entidades; ministerios, comunidades autónomas, empresarios, sindicatos, universidades… Ignacio Buqueras es el presidente de la Comisión y explicaba al diario ABC que «es necesario que los niños tengan voz. Son los que más lo sufren y, sin embargo, los que menos voto tienen en este asunto. Muchos por las tardes están casi abandonados».
Según la OCDE, España debe mejorar la conciliación de la vida laboral y familiar entre otras cosas por que no hay suficientes centros para atender a los niños fuera del horario escolar. Una cuarta parte de los abuelos se ocupan diariamente de sus nietos. Un fenómenos cada vez más extendido en países latinos.
En España las mujeres tenían en 2007 una media de 1,40 hijos, igual que 20 años antes, frente a 1,74 en el conjunto de los 34 países más desarrollados. En cuanto a la tasa de actividad de las mujeres españolas, era del 53,5%, frente al 59,6% en la OCDE, aunque España ha sido la más importante con 21 puntos porcentuales más desde 1995. Los autores del estudio reconocen los esfuerzos para ampliar el apoyo a las familias. Ahora la crisis, puede trasladarnos de nuevo al pasado.
La conciliación no existe, y creo que no existirá nunca porque en este país tenemos el concepto de que hay que empezar a trabajar a las 6 de la mañana y terminar a las 12 de la noche y todos los días de la semana. No hay apoyo en las empresas y ahora con la crisis menos porque te juegas el trabajo si pides permiso para llevar a tu hijo al médico. No hay conciencia de que los pobres hijos se crían solos en muchos casos y que los padres van corriendo todo el día para intentar ver un poco a su familia.
La conciliación no existe, y creo que no existirá nunca porque en este país tenemos el concepto de que hay que empezar a trabajar a las 6 de la mañana y terminar a las 12 de la noche y todos los días de la semana. No hay apoyo en las empresas y ahora con la crisis menos porque te juegas el trabajo si pides permiso para llevar a tu hijo al médico. No hay conciencia de que los pobres hijos se crían solos en muchos casos y que los padres van corriendo todo el día para intentar ver un poco a su familia.
La conciliación es un cuento chino.
Los «hombres jefes» no la aplican por su concepción de mujer = problemas. Las «mujeres jefas» tampoco, por el hecho de que no parezca que les doy trato de favor.
Es triste pero real.
La conciliación es un cuento chino.
Los «hombres jefes» no la aplican por su concepción de mujer = problemas. Las «mujeres jefas» tampoco, por el hecho de que no parezca que les doy trato de favor.
Es triste pero real.
Podemos engañarnos todo lo que queramos con palabras y discursos, pero la conciliación, hoy, no existe. Al menos en algunos trabajos. Es cierto que ha habido avances, pero seguimos haciendo equilibrios -y hasta milagros diría yo- para mantener una vida laboral y familiar y no morir en el intento…
Podemos engañarnos todo lo que queramos con palabras y discursos, pero la conciliación, hoy, no existe. Al menos en algunos trabajos. Es cierto que ha habido avances, pero seguimos haciendo equilibrios -y hasta milagros diría yo- para mantener una vida laboral y familiar y no morir en el intento…