Por Óscar Vázquez, periodista y maratoniano en Nueva York, Chicago, Londres, Berlín, París, Madrid y Barcelona.
La recta de meta de un maratón esconde meses de esfuerzo y sacrificio. Meses de ilusiones compartidas y de pequeños sueños de grandeza. Imagino a ese puñado de corredores populares enfilando los últimos metros del maratón más antiguo del mundo. Los imagino visualizando el gesto que harán al cruzar la meta, de quien se acordarán o de cómo lo celebrarán.
Imagino a ese atleta aficionado que ve un reloj que marca las cuatro horas y nueve minutos. Imagino su orgullosa sonrisa ya nada disimulada, sus ojos vidriosos y su alma de hombres o mujeres invulnerables. Han vencido al dolor, al cansancio y al agotamiento. Dejaron atrás el temido muro sin sospechar que unas millas más adelante la estupidez humana iba a cercenar el humilde sueño de quien aspira a ser grande sólo por un pequeño instante .
Imagino a esos corredores que escuchan un estruendo. Un instante de parálisis antes de preguntarse ¿“Dios, donde están los míos”? ¿”Estarán bien? “ Los imagino olvidándose de la medalla que persiguieron durante casi un año de duros entrenamientos y sacrificios, buscando el desesperado abrazo de sus parejas, hijos y amigos que esperaban entre el público. Imagino el reencuentro y las lágrimas de alivio antes de rescatar el espíritu solidario que llevan puesto todos los maratonianos. Los imagino a salvo y con la mente en las decenas de heridos y en los tres muertos. Los imagino chapurreando en inglés para explicar a la Policía y a los voluntarios de Boston que quieren echar una mano. Que quieren ayudar. Los imagino camino de los hospitales para donar sangre o simplemente para consolar a las víctimas y a sus familias.
Escribo estas líneas convencido de que quien o quienes hayan colocado los artefactos no podrán asomarse nunca al espíritu del maratón. Los bastardos que han matado a un niño de 8 años y a dos espectadores y que han mutilado a decenas de personas han conseguido sólo eso. Mutilar a decenas de personas. No entenderán nunca que un maratoniano no se rinde jamás. Que no cede ante las adversidades por muy cargadas de “goma 2” o tornillos que vengan. Que un “runner” no renunciará a la LIBERTAD de correr 42 kilómetros y 195 metros por las calles de las ciudades más importantes del mundo.
Esos malnacidos no entenderán que el maratón es un ejemplo de esfuerzo, entrega, sacrificio, solidaridad y compañerismo. Y no entenderán que todos nosotros, todos los runners, ya imaginamos, sin miedo, cómo será el final de nuestro próximo maratón. Levantaremos la vista, apuntaremos al cielo y recordaremos a los que nos dejaron en Boston.
¿Será que algún día se podrá cambiar esta sociedad? Ánimo a todos los que vais, vamos, a correr el domingo en Madrid y que en algún minuto de las tres, cuatro o cinco horas que cada uno tarde llegará a nuestras cabezas el recuerdo de Bostón. Nunca ha venido mejor la frase: «No nos pararán»
¿Será que algún día se podrá cambiar esta sociedad? Ánimo a todos los que vais, vamos, a correr el domingo en Madrid y que en algún minuto de las tres, cuatro o cinco horas que cada uno tarde llegará a nuestras cabezas el recuerdo de Bostón. Nunca ha venido mejor la frase: «No nos pararán»
[…] días tenemos todos los que nos hemos enfrentado alguna vez a un maratón. Esa foto, esa frase y estas palabras de Óscar Vázquez, otro pedazo de maratoniano, transmiten a la perfección la rabia, la impotencia, pero a la vez, el […]
[…] días tenemos todos los que nos hemos enfrentado alguna vez a un maratón. Esa foto, esa frase y estas palabras de Óscar Vázquez, otro pedazo de maratoniano, transmiten a la perfección la rabia, la impotencia, pero a la vez, el […]
Impresionante Oscar!! ..no se puede expresar mejor…
Uxia…animo…lo importante es empezar, da igual la distancia…
P.
Impresionante Oscar!! ..no se puede expresar mejor…
Uxia…animo…lo importante es empezar, da igual la distancia…
P.
Ayy que me emociono… y yo preparándome para 7km de naaaa.. Un besito, Ux
Ayy que me emociono… y yo preparándome para 7km de naaaa.. Un besito, Ux
Emocionar con palabras es un don….sigue cuidándolo, Oscar….
Emocionar con palabras es un don….sigue cuidándolo, Oscar….
Hoy voy a lo fácil. Suscribo totalmente lo que dice el post y el comentario de Pepe.
Hoy voy a lo fácil. Suscribo totalmente lo que dice el post y el comentario de Pepe.
Pero la vida de un niño vale lo mismo en EEUU, que en Siria, Afganistan, Iraq, pero para estos últimos no hay artículos. Matar a un niño en una ciudad o un pais con pseudo-democrácia no es más doloroso que hacerlo en otros paises cuya dictadura hay que derrocar para gobernar sobre su petroleo, a sus habitantes que les den. Cuantos condenados por la intervención caprichosa en irak?, donde esta ahí la democracia?. Un niño ha muerto, otro más, por que los que nos gobiernan adoran al dios dinero. Solo hay un enemigo con muchos nombres, pero sin armas para vencerlo. Descansen en paz.
pepe, eres tonto. Un saludo.
A pesar de que tienes la razón, en tu post, te has equivocado de pleno. Aquí se comenta el artículo que se lee publicado no la maldad generalizada del mundo y la sinrazón de la misma. Por supuesto que la vida vale lo mismo en todos los sitios… nadie lo duda, tal vez tú, que es como si te pareciera insignificante la muerte de otro inocente por ser lo habitual…. te las lucido!!
«Te has lucido Pepe»,creo que te has equivocado de foro. Tienes razón en todo lo que dices, pero yerras donde lo dices, además parece que sientes menos estas muertes porque no se han producido en países explotados y dominados.
Creo que la trágica noticia habla más de los valores de los deportistas populares, de su capacidad de sufrimiento, superación, compañerismo y esfuerzo.
Un artículo conmovedor Oscar.
Pero la vida de un niño vale lo mismo en EEUU, que en Siria, Afganistan, Iraq, pero para estos últimos no hay artículos. Matar a un niño en una ciudad o un pais con pseudo-democrácia no es más doloroso que hacerlo en otros paises cuya dictadura hay que derrocar para gobernar sobre su petroleo, a sus habitantes que les den. Cuantos condenados por la intervención caprichosa en irak?, donde esta ahí la democracia?. Un niño ha muerto, otro más, por que los que nos gobiernan adoran al dios dinero. Solo hay un enemigo con muchos nombres, pero sin armas para vencerlo. Descansen en paz.
pepe, eres tonto. Un saludo.
A pesar de que tienes la razón, en tu post, te has equivocado de pleno. Aquí se comenta el artículo que se lee publicado no la maldad generalizada del mundo y la sinrazón de la misma. Por supuesto que la vida vale lo mismo en todos los sitios… nadie lo duda, tal vez tú, que es como si te pareciera insignificante la muerte de otro inocente por ser lo habitual…. te las lucido!!
«Te has lucido Pepe»,creo que te has equivocado de foro. Tienes razón en todo lo que dices, pero yerras donde lo dices, además parece que sientes menos estas muertes porque no se han producido en países explotados y dominados.
Creo que la trágica noticia habla más de los valores de los deportistas populares, de su capacidad de sufrimiento, superación, compañerismo y esfuerzo.
Un artículo conmovedor Oscar.
No hay ideología capaz de justificar la sinrazón del asesinato indiscriminado de niños e inocentes, de hacer daño por el simple placer de ver sufrir a gente que se deja la piel por conseguir una meta con esfuerzo y entrega y que lo llevan a todos los campos de su vida. Los maratoniamos sois un ejemplo de tesón, voluntad, esfuerzo y sacrificio.Y vuestras familias también lo somos porque os apoyamos siempre. Espero veros a todos mirando al cielo en la próxima. No hay consuelo. Ojalá que a los autores la vida les devuelva el daño que han hecho.
No hay ideología capaz de justificar la sinrazón del asesinato indiscriminado de niños e inocentes, de hacer daño por el simple placer de ver sufrir a gente que se deja la piel por conseguir una meta con esfuerzo y entrega y que lo llevan a todos los campos de su vida. Los maratoniamos sois un ejemplo de tesón, voluntad, esfuerzo y sacrificio.Y vuestras familias también lo somos porque os apoyamos siempre. Espero veros a todos mirando al cielo en la próxima. No hay consuelo. Ojalá que a los autores la vida les devuelva el daño que han hecho.
Así es, somos maratonianos y no nos rendimos jamás. Mucha fuerza para los heridos y las familias de los fallecidos
Así es, somos maratonianos y no nos rendimos jamás. Mucha fuerza para los heridos y las familias de los fallecidos
Amén. No se puede decir ni mejor ni con más claridad.
Amén. No se puede decir ni mejor ni con más claridad.