Creo que no hay mucho que decir después de ver la alegría de Nadia ajena al enemigo que lleva dentro. Nada que decir si habéis escuchado y visto la valentía de sus padres. El bebé venía con un pan envenenado debajo del brazo. Pero esa condena a muerte no les paralizó y han conseguido mucho más de lo que la ciencia esperaba. El dinero no da la felicidad pero la facilita y en su caso es imprescindible para que la niña siga viva. Desde «El Universo de Martina» os pedimos ayuda para Nadia. Y si queréis más detalles os recomiendo leer a Pedro Simón en EL MUNDO. Sus artículos siempre me conmueven pero éste último, al que ha llamado «Mi bella princesa» , es un S.O.S. ; un puñetazo a nuestras conciencias.
No comparto la opinión de Mariana. La sociedad está anestesiada con tantas dosis de desgracias. Si se le pone cara a la desgracia hay mejor respuesta. Nadia no pierde nada y puede ganar mucho. Mi solidaridad.
Gracias Rosa. Has dado en el clavo. Un abrazo y muchas gracias por tu fidelidad.
No comparto la opinión de Mariana. La sociedad está anestesiada con tantas dosis de desgracias. Si se le pone cara a la desgracia hay mejor respuesta. Nadia no pierde nada y puede ganar mucho. Mi solidaridad.
Gracias Rosa. Has dado en el clavo. Un abrazo y muchas gracias por tu fidelidad.
Ayudemos a Nadia. A ella y a tantos niños que necesitan tratamientos carísimos para salir adelante, para tener esperanza.
No me gusta, en cambio, esa exposición de la niña yendo a programas de TV en directo, por mucho cariño y ternura que le den y bromeen con ella. Me parece totalmente innecesario y hasta contraproducente. Sólo con la presencia de los padres es suficiente.
Pero sí, ayudemos.
Gracias por tu comentario Mariana. Cuando escribía el «post» también sentí cierto pudor pero creo que en casos tan desesperados hay que cruzar muchas líneas. Como madre lo haría. Conozco la sensación de que un hijo pueda morir y si necesitara el dinero y pensara que algunas personas sólo contribuirían después de ver a mi hija la llevaría adonde hiciera falta. Pero tienes razón en que es un tema delicado y en que lo principal es ayudar. Un abrazo muy fuerte.
Ayudemos a Nadia. A ella y a tantos niños que necesitan tratamientos carísimos para salir adelante, para tener esperanza.
No me gusta, en cambio, esa exposición de la niña yendo a programas de TV en directo, por mucho cariño y ternura que le den y bromeen con ella. Me parece totalmente innecesario y hasta contraproducente. Sólo con la presencia de los padres es suficiente.
Pero sí, ayudemos.
Gracias por tu comentario Mariana. Cuando escribía el «post» también sentí cierto pudor pero creo que en casos tan desesperados hay que cruzar muchas líneas. Como madre lo haría. Conozco la sensación de que un hijo pueda morir y si necesitara el dinero y pensara que algunas personas sólo contribuirían después de ver a mi hija la llevaría adonde hiciera falta. Pero tienes razón en que es un tema delicado y en que lo principal es ayudar. Un abrazo muy fuerte.