Eric Moger era gerente de un restaurante de Essex en el Reino Unido. Una persona corriente con una vida normal: Tenía 56 años, dos hijos, tres nietos y estaba a punto de iniciar una nueva vida con su prometida. Andaba en los preparativos de la boda cuando le diagnosticaron un tumor muy agresivo bajo la piel de la mejilla. Se sometió a un cirugía de emergencia para extirpar el cáncer y esa intervención le cambió la vida: Perdió el lado lado izquierdo de su cara, incluidos el ojo, el hueso de la mejilla y la mayor parte de la mandíbula. Durante cuatro años ha convivido con un enorme agujero en lo que hasta entonces era el rostro de un hombre maduro, hasta que la tecnología le ha devuelto lo que la enfermedad le robó.
El milagro lo ha obrado la novedosa técnica de impresión tridimensional. Un escáner de la parte sana de su cráneo ofreció todos los datos necesarios para reproducir por ordenador los rasgos faciales que Eric perdió en el quirófano.
La impresora 3D hizo el resto: fabricó en nylon capa por capa una prótesis que ha resultó ser una copia exacta de la mitad de la cara sana de Eric. La prótesis se sujeta al cráneo mediante un sistema de imanes.
Eric Moger, antes de la enfermedad
La intervención, la primera de este tipo que se realiza en el Reino Unido, ha devuelto a Eric la vida que un día le arrebató el cáncer y ha abierto un mundo hasta ahora inimaginable en el campo de la medicina.
diosssssssssssssss!!!!…. esto se llama hacer algo útil por la humanidad ….si la última fotografía es él después de …me rindo.
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