apsoe

Los tres candidatos a liderar el PSOE tienen un único destino. El de reconstruir la maltrecha convivencia hecha añicos en las filas socialistas. Las campañas de Madina, Sánchez y Tapias esconden mucho recelo y desconfianza además de buscar el poder a cualquier precio.

El día después del 13-J,- el domingo elegido para que cerca de 200.000 militantes entreguen el destino del PSOE a un solo hombre-, será muy complicado gane quien gane. El partido afrontará una travesía en el desierto que se prevé larga porque quien asuma las riendas deberá hacer encaje de bolillos para recuperar la ilusión y las ganas de ganar. El partido afronta su situación más difícil en el momento más complicado de España. El aparato de Ferraz ha hecho todo lo posible para inventar un candidato en tiempo récord con una visión de Estado a priori más responsable.

asanchezmefe_20140627_190258_pa0645_29567_1

Creen quienes manejan el PSOE entre bambalinas que Pedro Sánchez garantiza una visión más centrada de la política y con mayor margen para posibles pactos de calado con el PP. Esa es la razón por la que han hecho todo lo posible para que el “cara a cara” entre Madina y Sánchez se convirtiera en un duelo a tres. El aparato facilitó la concesión de avales a Tapias convencido de que una pelea por la izquierda del PSOE restaría votos al vasco Eduardo Madina de alma republicana y perfil más izquierdista. Sánchez parte con una clara ventaja en el número de avales pero bien sabe que esa diferencia no garantiza la victoria.

aBorrell_almunia--644x362

Le pueden preguntar a Joaquín Almunia con su histórico batacazo ante Borrell. Sánchez ha dado la vuelta a los pronósticos en apenas tres semanas y está ante la oportunidad de su vida. Ahora falta saber si el PSOE y por extensión España está,- con permiso de Madina-, ante un nuevo Zapatero o ante un líder con mayor poso político y mejor preparación intelectual. ¡Qué acierten por el bien de todos!