Tengo que reconocerlo, la idea del título no es mía(¡gracias Virginia!). Pero es perfecta.Porque no he conocido a nadie que tenga los dedos de las manos tan suaves comoesta mujer. Ella dice que el ácido glicólico le ha borrado las huellas de losdedos… por eso es la mujer sin identidad. Aunque sea conocida en todo elmundo. ¿De quién son estas manos?Pasad, pasad… os lo voy a contar.
Hace un par de meses os hablé de Linda Meredith. La Reina de los Faciales. Una esteticista británica que tiene entre sus clientes acelebrities de todo el mundo. Ahora, El Universo de Martina ha tenido la oportunidad de conocerla y recibir uno de sus tratamientos.
La cita, en Tacha, uno de los salones más exclusivos de Madrid.
¿Qué decir?…Que todo salió perfecto.



Es alta, elegante y dulce. Con un fachón impresionante (no voya deciros su edad  pero os aseguro quealucinaríais).


Su filosofía, ya sabéis, la piel refleja todo lo que nospasa en el cuerpo, física y mentalmente. Por eso no todos los días necesitamosel mismo tipo de cremas. Hay que estudiarla, vigilarla y darle lo que pide.
Tumbada en la camilla aproveché para hacerle millones depreguntas. Es una gurú de la belleza… ¿quién mejor que ella?
Me cuenta, por ejemplo, que el mayor enemigo de la piel en la época en la que vivimos es la polución… y elestrés. De hecho, dice que ha observado, que las españoles (o mejor dicho, las españolas que vivimos enMadrid) tenemos la piel más apagada que el resto. Y es por la contaminación.

Que hay mucho de genética pero que hay que cuidarse, SÍ O SÍ.Imprescindible lavarse la cara por la noche… y por la MAÑANA, para retirar todala grasa que producimos al dormir.

Ni agua caliente ni agua fría para la cara. Nada de extremos… tibia, lo mejor.

¿Lo peor para la piel? Abusar de los peelings que reducenlas capas de la piel.
Y cosas muy divertidas. Por ejemplo que a sus clientesjaponeses no puede hacerles extracción de puntos negros porque su tipo de pielenrojece con mucha facilidad. O que los rusos, por las condiciones climatológicas que soportan, la tienen más gruesa ( ¡¡¡la piel!!!) que los europeos.
Linda se despide del Universo diciendo que las arrugas nodesaparecen. Que hay que aceptar el paso del tiempo con dignidad. Aunque eso no significa que no haya que cuidarse.
La cita sirve para desmentir unbulo que se inventó la prensa británica y que ella niega. No trata a la Reina deInglaterra. Ni falta que le hace. Para reina, ella.
¿Dónde?
En Tacha y Carmen Navarro, Madrid.
En Hotel Mandarín Oriental, Barcelona.