Entre mis miles, millones me atrevo a decir, de lectoras que tengo cada miércoles en El Universo de Martina, quiero realizar una encuesta. ¡Que levante la mano la que se ha comprado un triquini porque le quedaba bien, porque le gustaba o porque era bonito! ¿Cuántas? ¿Mamá, Cris, Isa, Coco, Bego, María…?

En la pasarela Cibeles, cuando se presenta la temporada de verano, los veo. Salen en esos cuerpos de modelo y pienso: «la verdad, quedan espectaculares». Andrés Sardá propuso uno en rayas y asimétrico. Dolores Cortes uno en el tejido de la temporada, el croché. Y Juana Martín, un estilo navy, siempre de actualidad.

Las maniquíes salen a la pasarela luciendo triquinis, se dan un paseo andando y se vuelven al backstage. Pensemos en esa misma prenda en tu cuerpo. El de Andrés Sardá, que es precioso. Pero poneros en situación. Estáis en la playa, luciéndo triquini, cuando tu hijo decide que quiere jugar a las palas. Vale, vamos a jugar a las palas en triquini. El modelo en cuestión, como además es asimétrico, deja escapar un michelín y el pecho derecho… vamos, que al final terminas como «La libertad guiando al pueblo» de Delacroix.

El de Dolores Cortés está hecho de croché, por lo que cuando salgas de darte un baño, el croché, que es la prenda que más de sí se da del mundo, termina en tus tobillos. Y por último el de Juana Martín, ideal para tirarse de cabeza y acabar, literalmente, en pelotas.

Gracias a Dios, esto es una opinión personal, el triquini parece que ya sólo le gusta a Ana Obregón, París Hilton o Elisabetta Gregoracci. Ellas sin duda posan en los días de playa y no tienen michelín que lucir. Pero si alguna quiere uno, todavía puede encontrarlos en las tiendas. Este año tienen en Naf Naf, estilo navy o en Dolores Cortés.

Hubo una temporada, hace un par de años, que Calzedonia (firma que recomiendo para baño porque en calidad precio es de las mejores) se volvió loca y sacó tres cuartas partes de su colección en triquinis. Creo que fue la colección que menos vendió de su historia. Este año han sacado un modelo, este negro troquelado. Una firma de baño que acabo de descubrir en Volvom y ellos te preponen este complicado triquini.

Los triquinis, estos dos modelos son la propuesta de Goldenpoint, son además un engorro para las marcas que deja el sol. Si decides poner morena con un triquini, ya sólo vas a poder llevar ese traje de baño todo el verano porque las marcas que te va a dejar sólo las va a cubrir él mismo.

Y para terminar os planteo una duda existencial que cada verano me surge con los triquinis. ¿Es que todos tienen que tener pedrería o estos estampados tan terribles de mujer fatal? debe ser que todas las firmas crean sus modelos pensando en que sólo Ana Obregón, París Hilton y Elisabetta Gregoracci los van a llevar.

¿Alguna se atreve? si os atrevéis, queremos ver foto luciendo triquini. Yo, desde luego, paso.