¡Qué no falte de nada! ¿Como encontrar un hueco para todo en 50 m2? Pocos metros aprovechados al máximo. Métete en este rincón de sorpresas.

 



Solo 9 metros en una cocina para quedarse. En una pequeña esquina, que en origen era un tendedero, está lo fundamental: vitrocerámica, horno, lavadora, lavaplatos, hasta un robot de cocina.



El resto se ha dejado para disfrutar de un color vino que rompe la frialdad de una cocina y un armario del suelo al techo aprovechando un rincón de la estructura. Poco espacio en el que todavía nos hemos permitido el lujo de dejar una pared en blanco, solo para pequeños detalles.




El edificio es de los años setenta con paredes que pierden o ganan las líneas con columnas o huecos. En el salón se ha aprovechado ese espacio con una libreria a medida. De fondo, un papel pintado que une ese espacio con la entrada. Lo mismo ocurre en el espacio de la televisión. Y ¡qué bonito este mueble años sesenta al que se le han cambiado los tiradores!. Aunque no lo parezca es de IKEA. Me quedo tambien con ese espejo ovalado hecho a medida.















La habitación es para no salir de ella. La pared berenjena al fondo y un armario empotrado y cabecero que se convierte en casi todo. 











Aparece y desaparece la mesilla de noche, el zapatero o incluso un perchero para collares. Todo está hecho a medida. El capricho esta lámpara de LUZ DE LUNA









No había baño pero se lo han inventado casi incorporado a la habitación. Sin puerta y con un cristal en la parte de arriba para no perder la luz. Un inodoro triturador, para pequeños espacios, que funciona en los lugares donde no hay infraestructura. La pared forrada de gris……..imitanto piedra. El espejo es de MUSGO. ¡Qué bonito!