La gotera del Congreso cómo símbolo de una Estado que se deshace y como metáfora de un país lleno de vías de agua. Quiso el azar que la chapuza parlamentaria se plasmara delante de varios atónitos ciudadanos japoneses y a pocas horas de la demostración de poderío del independentismo catalán. El agua caía a chorros mientras cientos de miles de catalanes preparaban sus bártulos, barretinas y banderas para lanzar un diáfano desafío al Estado. Quieren la independencia y la quieren ya. Entre la irresponsabilidad de Artur Mas y la incompetencia de Mariano Rajoy se ha creado un inmenso monstruo que parece imparable. Los catalanes serán lo que quieran ser y el día que el resto de españoles entiendan esta máxima estarán contribuyendo, sin duda, a rebajar el suflé de un nacionalismo que se alimenta de la intolerancia e incomprensión ajena. Reaccionar con virulencia a la propuesta soberanista no hace más que engordar el sueño de parte de una sociedad que no está a gusto con el resto de españoles.
Artur Mas impulsó la bestia de un independentismo voraz que convirtió la Diada en un día de gloria mediática. No fueron un millón seiscientos mil como sostiene la Generalitat,- puestos a exagerar y manipular podrían hablar de tres millones-, pero sí los suficientes para tomar nota. Necesitaban medio millón de catalanes para llenar la cadena por la independencia y lo lograron. Desde esa perspectiva, enhorabuena por una iniciativa festiva y cívica de unos organizadores que, pese a la euforia, no deberían desdeñar a esa mayoría silenciosa de ciudadanos que se quedaron en casa. Uno de cada diez catalanes se echó a la calle a pedir un Estado propio dentro de Europa. Es decir, casi los mismos que votaron a Esquerra Republicana de Catalunya en las últimas elecciones autonómicas. ¿Qué piensa el resto? En política, como en la vida, lo que parece un problema puede convertirse en la mejor solución. Perder el miedo al referéndum de independencia puede ser, a la postre, el gran bálsamo en las relaciones Catalunya-España. Quizás más de un independentista de los que descorcharon cava después de la Diada se lleve el “sorpresón” de su vida.
“I HAVE A DREAM”
Yo también tengo un sueño, señor Mas. Sueño con una clase política que trabaje para solucionar los problemas de los ciudadanos y no para alimentar egos. Sueño con unos dirigentes que se esfuercen en hacer la vida más fácil a los demás. Anhelo una clase política alejada de la demagogia y el populismo. Sueño con gente seria, responsable y trabajadora. Sueño que vivo en un país donde la estulticia esquiva a quienes usan el poder para engrandecer su soberbia. Sé que es mucho pedir, señor Mas, pero no pierdo la esperanza de que a usted le dé un ataque de sensatez y deje de compararse, por ejemplo, con Martin Luther King. El daño que usted ha hecho a la convivencia de catalanes y españoles es difícilmente superable. Se le fue de las manos el órdago soberanista que sacó de su chistera para tapar las vergüenzas de un Gobierno demasiado acostumbrado a convivir con la corrupción, – casos Palau, ITV-, y cómodamente instalado en el despilfarro. Huyó hacia adelante y alimentó a un independentismo que le guste o no le va a devorar. Al president de la Generalitat, tampoco al del Gobierno de España, no se le exige talento político. Bastaría con la responsabilidad de la que usted carece. Llegará el día señor Mas,- y está cerca-, de que su sonrisa tan bobalicona como la de su portavoz Francesc Homs se borre de un electoral plumazo. Llegará el día, señor Mas, en que Esquerra Republicana le derrote en las urnas y lamine el capital electoral de CIU. Y entonces, usted pasará a la historia. No como el hombre que dotó de un Estado propio a Catalunya sino como el político que destruyó a su propio partido.
FASCISTAS
Lo llevan escrito en la cara. El odio. La mediocridad, la soberbia, la chulería, la prepotencia, la arrogancia y el desprecio. Son violentos e intolerantes. Fascistas atrapados en un submundo de estulticia. Especímenes cercanos al mundo animal que esgrimen banderas que difícilmente representan a alguien salvo al colectivo de los cafres. Entraron en la delegación de la Generalitat en Madrid al grito de “Catalunya es España”. ¿Alguien les puede explicar que su actitud sólo beneficia a los que quieren irse? Tan fascistas, tan cafres, como esos “valientes” a cara tapada que queman banderas de España, Europa y Francia y retratos del Rey en nombre de una “Catalunya lliure”. Ojo con el fascismo venga de donde venga.
Supongo que ese es el sueño todos, bueno, de casi todos, que al final los que sujetan los hilos de la historia sólo sueñan con enriquecerse y lo que cueste o los que caigan en ello les importamos una mierda. Miedo me da mirar atrás y ver que la historia es cíclica. Hace poco un alemán me dijo que en España tenemos los políticos que nos merecemos. Después de la indignación primera, me pregunto si en el fondo no tendría razón. Y es que al final tragamos con todo y somos unos conformistas que hace tiempo que tendríamos que haber explotado y no permitir lo que nos hacen. Ojalá que las goteras hagan que ese techo se les caíga encima..metafóricamente hablando, por supuesto.
Supongo que ese es el sueño todos, bueno, de casi todos, que al final los que sujetan los hilos de la historia sólo sueñan con enriquecerse y lo que cueste o los que caigan en ello les importamos una mierda. Miedo me da mirar atrás y ver que la historia es cíclica. Hace poco un alemán me dijo que en España tenemos los políticos que nos merecemos. Después de la indignación primera, me pregunto si en el fondo no tendría razón. Y es que al final tragamos con todo y somos unos conformistas que hace tiempo que tendríamos que haber explotado y no permitir lo que nos hacen. Ojalá que las goteras hagan que ese techo se les caíga encima..metafóricamente hablando, por supuesto.
Yo también sueño con gente seria, responsable, trabajadora y CAPAZ
No sufra por los catalanes. Para mí que todo es un montaje para tenernos entretenidos.
¿Qué pasó con los bloques de Gibraltar?. ¿Cuál es la próxima serpiente de verano?.
Desde luego que dan miedo los fascismos vengan de donde vengan.
Yo también sueño con gente seria, responsable, trabajadora y CAPAZ
No sufra por los catalanes. Para mí que todo es un montaje para tenernos entretenidos.
¿Qué pasó con los bloques de Gibraltar?. ¿Cuál es la próxima serpiente de verano?.
Desde luego que dan miedo los fascismos vengan de donde vengan.